
ŠKODA: 120 AÑOS DE PASIÓN POR LA MOVILIDAD
ŠKODA, ahora bajo el control de Volkswagen AG, es una marca que, aunque se vende sólo en algunos mercados, es una pieza importante de la historia automotriz, contando también de cuando fue propiedad del gobierno de la entonces república de Checoslovaquia, durante su época socialista.
Todo empezó con un pequeño taller de bicicletas de Laurin y Klement, en diciembre de 1885.En aquel momento, el mecánico de bicicletas Václav Laurin y el hombre de negocios Václav Klement fundaron la compañía Laurin & Klement (L&K).
Lo que empezó como un taller de reparaciones evolucionó rápidamente para ser un fabricante de bicicletas, que triunfaron en el mercado nacional y extranjero bajo el nombre de “Slavia”. El negocio era brillante, y apenas cuatro años después Laurin y Klement empezaron a fabricar motocicletas.
En 1905, la compañía hizo un gran avance en la fabricación de automóviles con el Voiturette. Este modelo tenía un motor bicilíndrico de 7 CV y lograba una velocidad máxima de 40 km/h.
La gama creció rápidamente. En 1907, L&K era el mayor fabricante de automóviles en la antigua monarquía austro-húngara con nueve modelos en su gama; desde los pequeños bicilíndricos y los coches de competición de cuatro cilindros hasta las furgonetas y autobuses.
La Primera Guerra Mundial, las secuelas de la postguerra y la crisis de los años 20 afectaron considerablemente al desarrollo de L&K. Para fortalecer su posición en el mercado, se fusionaron con la fábrica ŠKODA (Pilsen, 1925), que entonces era la mayor compañía de la República Checa. De esta unión de fuerzas surgió el relanzamiento de la producción de automóviles en Mladá Boleslav.
Algunos vehículos legendarios de ŠKODA surgieron en la década de los 30. El primer modelo popular al alcance de los usuarios fue el ŠKODA 420 Popular, al que dieron continuidad otros hitos de la automoción como el prestigioso ŠKODA 640 Superb de seis cilindros, que marcó el éxito de la marca en aquel tiempo. La Segunda Guerra Mundial frenó este desarrollo positivo.
ŠKODA fue nacionalizada tras la guerra, pero incluso bajo las difíciles condiciones de la economía socialista, creó un número considerable de modelos en la década de los 40 como “empresa pública”. Entre ellos, se incluían el ŠKODA 1101 “Tudor”, el ŠKODA 440 “Spartak” y el legendario Roadster ŠKODA Felicia. Otro hito llegó en 1964 con el ŠKODA 1000 MB, que fue el primero con chasis autoportante, motor posterior y tracción trasera. El primer motor de aluminio fundido ya se situó en la parte trasera.
En 1987, el ŠKODA Favorit se convirtió en el primer compacto de tracción delantera de la marca, creado por el estudio italiano Bertone. Fue toda una revolución para un país del bloque del Este. En menos de dos años, la economía socialista se vino abajo.
Después de la Revolución de Terciopelo de 1989, ŠKODA necesitaba un socio estratégicamente fuerte. La fusión con el Grupo Volkswagen en 1991 marcó un paso decisivo en la marca, y se convirtió en uno de los mayores éxitos de la historia reciente de la automoción.
Las ventas anuales de la marca se sextuplicaron entre 1991 y 2014, año en el que la marca vendió más de un millón de vehículos por primera vez. De ser una marca de un solo modelo, ŠKODA ha pasado a contar con una atractiva y completa gama de modelos con alrededor de 40 versiones distintas.
Junto a la expansión de su gama de modelos, ŠKODA también ha ampliado y actualizado sus instalaciones. Además de las tres plantas en la República Checa, la compañía produce en diversos lugares del mundo como China, Rusia e India.