Por: Alberto Reynaga-Arenas

En la prueba que realizamos por el estado de Hidalgo comprobamos la potencia del motor, que se siente abundante y que está disponible casi de inmediato, cabe resaltar que el recorrido del acelerador debe ser ligeramente generoso, las ayudas tecnológicas para la conducción que implementa Explorer son muy estables y se agradecen en carreteras sinuosas sobre todo por la noche.

La comodidad en los asientos así como su ajuste al cuerpo son notables, en la versión más equipada cuenta con masaje en la parte media y alta de la espalda, los espacios interiores son generosos y los detalles cuidados al máximo, la parte de infoentretenimiento es robusta y muy fácil de operar ya que puede enlazar el smartphone tanto Android como iOS sin ningún problema. La pantalla muestra información completa y tiene el tamaño idóneo, los controles al volante están dispuestos de la forma clásica de Ford, siendo cómodos, sencillos de recordar y operar, el sistema de clima trabaja perfectamente y en un corto tiempo se puede disfrutar del mismo. El ruido exterior es sorprendentemente bajo, lo que eleva la experiencia y comodidad de manejo. En la parte trasera los asientos, el espacio entre piso y techo deja que se acomoden personas altas y robustas sin queja alguna. La extensión de las ventanas permiten al conductor ver perfectamente lo que sucede en un rango amplio tanto al frente como a los lados, en general las ayudas técnicas trabajan a la perfección, tanto las activas como las pasivas.

Los viajes largos en carretera no serán ningún problema debido a la comodidad y versatilidad de los espacios, aunque se desearía que la suspensión fuese un poco más rígida, sobre todo para tomar vueltas cerradas y cortas, en el modo sport los cambios son asistidos por la computadora y no son tan responsivos como uno quisiera, los frenos son potentes y realmente acortan las distancias siempre y cuando uno este muy atento a lo que está pasando en el camino, sin duda alguna es una experiencia muy positiva de manejo, la dirección es precisa y sobre todo en la ciudad se llega a percibir ágil, en casi todos los caminos se muestra bien plantada.

Así pues estimado lector la nueva Ford Explorer, con las nuevas tecnologías que porta además de las asistencias, su diseño exterior muy actual y el estilo interior hacen que la experiencia de manejo sea muy placentera tanto en ciudad como en carretera, un automóvil para disfrutar el camino desde el momento en que abre uno la puerta.